Nuevos requerimientos de la sociedad actual

Nos encontramos en una sociedad en que la información está a disposición de cualquier persona, por ello surgen conceptos tales como: “sociedad de la información”, “aldea global”, “sociedad del conocimientos”, sociedad de saber”, etc. Por ello es necesario analizar estas mediante lo que menciona Abdul Waheed Khan (subdirector general de la UNESCO para la Comunicación y la Información).

Escribe: “La sociedad de la Información es la piedra angular de las sociedades del conocimiento. El concepto de “sociedad de la información”, a mi parecer, está relacionado con la idea de la “innovación tecnológica”, mientras que el concepto de “sociedades del conocimiento” incluye una dimensión de transformación social, cultural, económica, política e institucional, así como una perspectiva más pluralista y desarrolladora. El concepto de “sociedades del conocimiento” es preferible al de la “sociedad de la información” ya que expresa mejor la complejidad y el dinamismo de los cambios que se están dando. (...) el conocimiento en cuestión no sólo es importante para el crecimiento económico sino también para empoderar y desarrollar todos los sectores de la sociedad”.

Las nuevas tecnologías de la información no son sólo herramientas que aplicar, sino procesos que desarrollar. (...) Por primera vez en la historia, la mente humana es una fuerza productiva directa, no sólo un elemento decisivo del sistema de producción

Pero existen numerosos diagnósticos de la sociedad actual que muestran que la ruptura de los vínculos tradicionales de la solidaridad provocada por el proceso globalizador genera nuevas formas de exclusión, de soledad y de marginalidad. Las formas de asociación y de expresión de algunos de estos sectores excluidos tienden a apoyarse en valores de intolerancia, de discriminación y de exacerbación de los particularismos. Mientras en la cúpula, las elites que participan de la economía plantean el riesgo de que su desapego a la nación estimule un individualismo a-social, basado en la falta total de solidaridad, en la base se aprecian fenómenos regresivos de rechazo al diferente, de xenofobia y de cohesión autoritaria.

Este análisis evidencia la importancia crucial que adquiere hoy la definición de políticas educativas que garanticen a todos una educación de muy buena calidad. Acceder a una educación de este tipo se ha convertido en la condición necesaria de cualquier estrategia de cohesión social, de participación política, de ingreso al mercado de trabajo y de desarrollo de las competencias básicas que permitan a cada uno la construcción de sus opciones de vida.

Por ello, nuestro sistema educativo debe sufrir grandes renovaciones, ya que, no puede quedar al margen de estos nuevos cambios sociales. Debe atender a la formación de los nuevos ciudadanos y la incorporación de las nuevas tecnologías ha de hacerse con la perspectiva de favorecer los aprendizajes y facilitar los medios que sustenten el desarrollo de los conocimientos y de las competencias necesarias para la inserción social y profesional de calidad. Y para el logro de esto se debe evitar que la brecha digital genere capas de marginación como resultado de la analfabetización digital.

Para que estas tecnologías estén verdaderamente al servicio de la enseñanza y del aprendizaje y contribuyan a la formación de los ciudadanos y los trabajadores que necesitamos que nuestra sociedad, debe estar acompañada de una evolución pedagógica. En que exigen un cambio de rol en el profesor y en el alumno. Nosotros los docentes no podemos seguir ejerciendo funciones tradicionales.

Los estudiante no puede experimentar el conocimiento de una manera que resultaría imposible utilizando fuentes de referencia tradicionales y fuesen significativas, ya que, el acceso a estos recursos incide positivamente en la disposición que muestran los alumnos para profundizar y enriquecer su conocimiento indagando más fuentes de información. Con el soporte de este engranaje interactivo, la curiosidad e imaginación del alumno se transforman en un poderoso dispositivo capaz de irrumpir en vastos dominios del conocimiento.

Por esto nosotros los maestros debemos cualificar nuestro trabajo en el aula aprovechando las posibilidades que ofrecen las TIC. Por ejemplo, diversificar y enriquecer los contenidos académicos a los que hace referencia, aprovechar las múltiples fuentes de información de internet; mejorar las propuestas de escritura que propone a sus estudiantes utilizando el procesador de texto, lo cual les permite que se concentren más en elaborar, ampliar o precisar aspectos de contenido que en corregir aspectos formales del texto. También aumentar la motivación hacia la lectura y fomentar la capacidad de trabajo en grupo mediante herramientas como el correo electrónico o el chat.

Estos recursos también ayudan a la colaboración en los alumnos, mejoran la motivación y el interés, favorecen el espíritu de búsqueda, promueven la integración y estimulan el desarrollo de ciertas habilidades intelectuales tales como el razonamiento, la resolución de problemas, la creatividad y la capacidad de aprender a aprender. Las tecnologías informáticas han servido para facilitar la búsqueda de material didáctico, contribuir a la colaboración con otros e incitar a la planificación de las actividades de aprendizaje de acuerdo con las características de la tecnología utilizada.

Estas estrategias de aprendizaje genera a alumnos(as) activos y dinámicos en la construcción del saber, logrando de esta forma construir aprendizajes reales, es decir, significativo. Entregándoles aprendizajes de calidad, útiles para toda su vida y sin desventajas con otros.

11 enero, 2011

Nuevas formas de leer.

Uno de los grandes desafíos de los profesores de lenguaje y comunicación y de los docentes en general es la adquisición del hábito de lectura en niños(as) y adolescentes. Es de conocimiento general las ventajas de la lectura, tales como: La autonomía e independencia, el sentido crítico y provocar la inquietud intelectual aportando nuevas ideas, proporcionarnos conocimientos y argumentos, estimulando el razonamiento y la imaginación. Con ella ganamos en vocabulario, lo que nos permite mejorar en nuestras posibilidades expresivas y de comunicación. Siendo estas habilidades indispensable para nuestros estudiantes en formación.

Con la lectura se pueden satisfacer los deseos que cualquiera pueda tener de aprender, ya que es la fuente de adquisición de conocimiento. Pero estas ventajas han sido desechabas por los jóvenes de hoy, que han abandonando los procesos cognitivos que llegaron a nosotros con el libro y que tienen que ver con la adquisición de conocimiento, la creatividad, el pensamiento crítico, la originalidad, el análisis y la reflexión. Estas definiciones son reemplazadas por un modelo de pensamiento superficial, basado en las decisiones instantáneas y la falta de concentración, ya que sólo les gustan los principios de las cosas y nunca son capaces de terminar algo.

Una de mis motivaciones al elegir esta profesión fue el gusto por la lectura, el sumergirme en un libro e imaginar lo inimaginable.

Según Nicholas Carr menciona “Mi mente quedaba atrapada en la narración o en los giros de los argumentos y pasaba horas paseando por largos tramos de prosa. Ahora casi nunca es así. Ahora mi concentración casi siempre comienza a disiparse después de dos o tres páginas. Me pongo inquieto, pierdo el hilo, comienzo a buscar otra cosa que hacer. La lectura profunda que me venía de modo natural se ha convertido en una lucha”.

Scout Karp, quien escribe un blog sobre los medios de difusión en línea, confesó “hace poco me he dejado por completo de leer libros. “Hice el master en literatura en la universidad y era un voraz lector de libros —escribió—. ¿Qué ha pasado?” Y especula la respuesta: “¿Y si todo lo que leo es en la red, no se debe a que la forma en que leo haya cambiado, o sea, que esté sólo en busca de comodidad, sino porque mi forma de PENSAR ha cambiado?”

Este es un problema que a la mayoría les sucede, yo también me incluyo ¿mi forma de pensar ha cambiado? Pero ¿cuál es la explicación de este fenómeno?
El uso discriminado de la red, el Internet. Nicholas Carr sostiene “El internet, es un sistema de computación inconmensurablemente poderoso, está subsumiendo la mayoría de nuestras otras tecnologías intelectuales. Se está convirtiendo en nuestro mapa y nuestro reloj, nuestra imprenta y nuestra máquina de escribir, nuestra calculadora y nuestro teléfono, nuestro radio y nuestra televisión”.

La compañía de Google ha declarado que su misión es “organizar la información mundial y hacerla universalmente accesible y útil”. Procura desarrollar “el motor de búsqueda perfecto” al que define como algo que “entiende exactamente lo que uno quiere decir y le devuelve exactamente lo que desea”. Al entender de Google, la información es un tipo de producto, un recurso utilitario que puede extraerse y procesarse con eficiencia industrial. Mientras más sean las piezas de información a las que uno pueda “acceder” y mientras con mayor rapidez podamos extraer lo esencial de ellas, más productivos nos hacemos como pensadores.

¿Dónde termina esto? Pegunta Sergey Brin y Larry Page, los dotados jóvenes que fundaron Google cuando hacían su doctorado en ciencias de computación en Stanford, hablan con frecuencia de su deseo de convertir su motor de búsqueda en una inteligencia artificial, una máquina al estilo de HAL que sea posible conectar directamente a nuestros cerebros. “El motor de búsqueda supremo es tan inteligente como las personas… o más —afirmó Page hace unos años en un discurso—. Para nosotros, trabajar en búsqueda es una forma de trabajar en inteligencia artificial.”

En una entrevista concedida a Newsweek en 2004, Brin comentó: “No hay dudas de que si uno tuviera toda la información del mundo unida directamente al cerebro, o un cerebro artificial que fuera más listo que el propio, estaría uno mejor.” El año pasado Page dijo en una convención de científicos que Google “en realidad trata de construir una inteligencia artificial y de hacerlo en gran escala”.

Google, una empresa fundamentalmente científica, está motivada por un deseo de usar la tecnología, en palabras de Eric Schmidt, “para solucionar problemas que nunca antes se han solucionado” y la inteligencia artificial es el problema más difícil que hay”.

En este mundo “mucho mejor” o de “inteligencia artificial” el cerebro humano es sólo una computadora anticuada que necesita un procesador más rápido y un disco duro mayor.

Su suposición fácil de que estaríamos “mucho mejor” si una inteligencia artificial complementara, o incluso sustituyera, nuestros cerebros resulta inquietante, fascinante y cuando aun no ejercía me hubiese perecido extravagante e utópico.

A Woolf y Carr le preocupa que el estilo de lectura que promueve la Red y claramente a mi también, con un estilo de “eficiencia” y de “inmediatez” por encima de todo lo demás, esté debilitando tal vez nuestra capacidad para el tipo de lectura profunda que me motivo en la incursión de esta profesión.
Cuando leemos en línea, dice Woolfy, tendemos a convertirnos en “meros descodificadores de información”. Nuestra capacidad de interpretar textos, de hacer las ricas conexiones mentales que se forman cuando leemos con profundidad y sin distracción, sigue en gran medida desconectada.

Volvamos a realizar lecturas profundas que promueve el conocimiento que adquirimos de las palabras del autor y también esas irresistibles ansias por leer e imaginar. Carr menciona “En los espacios de calma abiertos por la lectura sostenida, sin distracción, de un libro o, si a eso vamos, por cualquier otro acto de contemplación, realizamos nuestras asociaciones, trazamos nuestras propias inferencias y analogías, promovemos nuestras propias idea”. La lectura profunda, como afirma Maryanne Wolf, es indistinguible del pensamiento profundo.

No perdamos los espacios de tranquilidad que nos estimulan a soñar, razonar, interpretar y cuantas más habilidades podemos desarrollar. Nunca olvidemos esos recuerdos de nuestra infancia donde observábamos a alguien leyendo en un sillón, patio o plaza. Desarrollemos nuestro propio ser y lo más importante, no les quitemos la posibilidad a nuestros estudiantes a conocer este mundo de la lectura profunda que no abre mundos inimaginables.

07 enero, 2011

FORMACIÓN DEL PROFESORADO PARA LA SOCIEDAD DE LA INFORMACIÓN

Estamos viviendo un momento histórico en el que la tecnología, especialmente los ordenadores y otras herramientas electrónicas han provocado un gran impacto. Con rápido acceso a enormes cantidades de información, conseguida a alta velocidad y cálculos precisos, la tecnología ha cambiado nuestras vidas y tiene un gran potencial para impactar fácilmente en como uno aprende y como ayudar a otros a aprender, por lo que se enfatiza en el aprendizaje.

Es por esto que la visión tradicional de la enseñanza y aprendizaje donde la planificación, desarrollo y evaluación de la enseñanza recae en manos del profesor. Se asume un mínimo nivel de diferenciación en el grado en el que los alumnos asimilan la información dada por el profesor. Sin embargo hoy en día se han incrementado las demandas hacia el alumno. Ahora se requiere un uso de habilidades de razonamiento superior y resolver complejos problemas. Los alumnos no los consideramos como recipientes vacíos esperando rellenarlos de contenidos, sino como sujetos que trabajan resolviendo problemas y buscando activamente el sentido de lo que les rodea. Implicados en analizar, preguntar, interpretar y comprender el mundo cambiante en el que viven.

El aprendizaje al definirlo es un concepto amplio y ocurre como resultado de una interacción con el ambiente; el aprendizaje requiere tiempo y esfuerzo. Aprendizaje es un cambio permanente en el comportamiento humano y puede darse en una variedad de ámbitos. Decimos que hay aprendizaje, cuando una experiencia produce un cambio relativamente permanente en el conocimiento o conducta del individuo. La palabra clave es cambio. Aprender es cambiar el nivel de habilidad o capacidad de una manera permanente. Por ello surge la perspectiva constructivista en que el conocimiento es construido por quien conoce, por esto no puede ser separado de él. El aprendizaje se relaciona con la construcción de nuevas interpretaciones, la construcción del conocimiento es un proceso de pensar sobre el interpretar la experiencia. Y como cada individuo tiene un conjunto de experiencias diferentes cada individuo construye un cuerpo único de interpretaciones. El aprendizaje está determinado por una interrelación compleja entre el conocimiento que posee el aprendiz, el contexto social y los problemas que deben de ser resueltos.

El teórico constructivista Vygotsky menciona la importancia del contexto social del aprendizaje. Para él la cultura le da al niño las herramientas cognitivas que necesita para su desarrollo. El tipo y calidad de estas herramientas determina el propio desarrollo de las personas. Padres y profesores son conductores de estas herramientas culturales que incluye al lenguaje, la historia cultural y el contexto social. Se diseña un escenario de formación donde el estudiante posee una serie de ayudas y orientaciones para la construcción de su propia solución del problema. Cuenta con una estructura de apoyo que le ayuda a buscar sentido al concomimiento que está construyendo basándose en su experiencia personal y en el contexto donde le conocimiento es aplicado. Hoy también se incluye las formas de acceso electrónico a la información. Se llama constructivismo social por la relevancia que se atribuye a la interacción con la gente -otros niños, padres, profesores- para el desarrollo cognitivo. Dentro de esta teoría utilizaríamos la tecnología para acercar a los estudiantes, para promover la interacción.

Según Maddux y colaboradores (2000) los principios de los contextos constructivistas de aprendizaje son:

• Proporcionar múltiples representaciones de la realidad.
• Centrarse en la construcción del conocimiento y no en la reproducción
• Presentar tareas reales (procesos de aprendizaje contextualizados)
• Facilitar la construcción del conocimiento dependiendo del contexto y del contenido.
• Apoyar la construcción colaborativa del conocimiento a través de la negociación social. Colaboración más que competición.

Otro aspecto fundamental a mencionar es el aprendizaje colaborativo que implica a los estudiantes trabajar juntos en proyectos o problemas, resolver o realizar tareas bien definidas, donde el aprendiz que descubre o realiza una tarea la muesta a los demás, el profesor guía este aprendizaje y aunque estos estudien en grupos son evaluados individualmente del aprendizaje que han conseguido. El aprendizaje cooperativo está organizado y orientado de manera que se asegure el aprendizaje. El profesor elige un grupo que refleje una diversidad de puntos de vista, habilidades, género, raza, y otras características, crea una comunidad que implica a estudiantes dependiendo entre si y distribuyendo tareas para conseguir una meta común. Es una metodología estable, que pude utilizarse durante un periodo largo de tiempo. El grupo se conoce, se cohesiona, aprenden juntos a resolver problemas, se desarrolla, identifica sus necesidades y busca solucionarlas. Sus miembros son activos, más que recipientes pasivos.


Cuando hablamos del uso constructivista de la tecnología señalamos que su utilización tiene que ser coherente que esté centrado en el proceso, con una concepción trasformadora, que promueva la motivación endógena, donde el sujeto sea protagonista, y el grupo sea el eje del aprendizaje, no el profesor y el texto. Ya que son las claves del aprendizaje significativo. Que parte de los conocimientos del alumno, que promueve su actividad desarrollando su autonomía y movilizando su motivación, que respeta sus intereses y respeta la diversidad.


Aplicación de las Nuevas tecnologías.

La introducción de las Nuevas Tecnologías en el currículo ha de ser coherente con el modelo pedagógico sobre el que se asienta nuestra actuación docente. En nuestro contexto educativo el modelo educativo es un diseño circular flexible y abierto que puede ser entendido como un conjunto de elementos que intervienen en los procesos de enseñanza-aprendizaje y entre los que se establecen relaciones de interacción. Desde esta perspectiva toma especial relevancia el papel del profesor como usuario de medios para enseñar, mostrar, investigar facilitando y mejorando el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Cuando las nuevas tecnologías son un recurso de la organización escolar se debe: Mejorar sustancialmente los procesos de gestión y administración de los Centros docentes y facilitar los procesos de comunicación dentro de la propia organización y desde ella hacia la Comunidad Educativa.

Por ello surge la informática educativa que es definida como el uso de la computadora en el diseño, desarrollo y evaluación de la instrucción. Una nueva manera de procesar la información, conocer y producir conocimiento ha venido desarrollándose con la extensión y diseminación de la tecnología y cultura informática. La tecnología educativa nos debe de facilitar herramientas para aumentar la eficacia, efectividad y atractivo de la experiencia de aprendizaje. En este contexto deben de ser entendida y utilizadas las nuevas tecnologías aplicadas a la educación.

Hoy en día gracias a la amplia extensión y difusión de los ordenadores personales, un sector muy amplio de la población tiene acceso a esta herramienta tecnológica. Básicamente, hay con una buena utilización de estas herramientas y software educativo, una mejora significativa en la comunicación pedagógica y la gestión de la información. Tanto en el desarrollo de las habilidades y utilizando programas informáticos para áreas curriculares específicas como organizativas como de las discentes, su importancia ha sido decisiva.

Cada vez son más numerosos y atractivos los materiales multimedia interactivos, estos materiales que integran diferentes medios en un solo soporte permitiendo interactuar, manteniendo una doble dirección en la comunicación, gracias a su estructura de navegación y las posibilidades comunicativas del interfaz (claras indicaciones de intervención, buena estructuración y diseño gráfico). Como también encontramos libros multimedia, hipermedia, enciclopedias y archivos, simulaciones y juegos, han empezado a constituir parte integrante de nuestros recursos de aprendizaje.

La riqueza que el mundo multimedia puede aportar a la educación es sin lugar a dudas, muy importante: ilustrar conceptos, mostrar situaciones o escenas y presentar múltiples fuentes de información en un mismo soporte (texto, imagen y sonido). Todo ello puede lograr favorecer el aprendizaje individualizado y a aumentar la motivación.

Internet es un nuevo espacio educativo donde podemos edificar una parte importante de la práctica educativa, tanto como consumidores, como usuarios y productores. La utilización de fuentes diversas de información, el correo electrónico, la navegación por las páginas web, el uso contextualizado del chat o del comic chat, la integración curricular de la teleconferencia, el telnet, etc. Enriquecen y a la vez complican el escenario donde se desarrolla la educación.

La integración sostenible de la tecnología en nuestros centros educacionales exige el desarrollo profesional de los enseñantes como tecnólogos. Y que se den una serie de condiciones asociadas al uso de la tecnología que creen un ambiente favorable que trasforme nuestra cultura escolar y favorezca su integración en nuestras rutinas diarias, así como también la definición del componente tecnológico en un lugar privilegiado en nuestro proyecto educativo. Una vez movilizada la motivación profesional y la definición colectiva del papel de la tecnología, se debe favorecer en el centro escolar una reflexión crítica para identificar los conocimientos necesarios para nuestra práctica. Es muy importante el desarrollo de proyectos que sirva para identificar las habilidades informáticas necesarias para su desarrollo, impartir enseñanza necesaria para que el profesorado aumente sus competencias profesionales en el terreno tecnológico y ayudarle a desarrollar un amplio abanico de posibilidades y aplicaciones de lo que aprende en relación con su práctica profesional. Tenemos por lo tanto, un esquema de desarrollo profesional que tiene que basarse en la motivación del profesorado, promovida y favorecida por la apertura y reflexión sobre los cambios que se están dando en nuestra sociedad de la información.
La identificación de proyectos que exijan nuevas competencias, la impartición de formación orientada a la adquisición de conocimiento tecnológico para el desarrollo de proyectos significativos en el contexto del aula o centro, animar la creatividad para la trasferencia del conocimiento pedagógico asociado. Este proceso de formación permanente va a permitir que se desarrolle un ámbito de conocimiento sobre la aplicación de la nueva tecnología a la educación que integre la utilización práctica de la tecnología audiovisual, multimedia y telemática orientada a la mejora de los proceso de enseñanza y aprendizaje, programas y centros escolares.

La formación del profesorado para la sociedad de la información, exige un cambio en la tarea del profesor desde las propias actividades de planificación y consulta de recursos, hasta el diseño de las actividades concretas de aprendizaje para sus alumnos para desarrollar en el aula, pasando por las posibilidades de consulta y relación con otros profesionales a través del correo electrónico, webs específicas y listas de distribución. Este es un desafío que debemos asumir todos los docentes.

Gracias a la expansión de la tecnología en nuestra sociedad, la escuela está integrando cada vez más, recursos tecnológicos pero lo importante es tener un modelo de integración de la nueva tecnología combinado con formación en la práctica vinculada a proyectos, que den sentido y asienten la renovación en el conocimiento y desarrollo profesional de los profesores.

Nuestro punto de partida debe ser el trabajo de nosotros los profesores y en el desarrollo de actividades de mejora. Introducir la tecnología en las aulas con un modelo coherente de enseñanza. Identificando desde nuestra planificación los puntos de integración de la nueva tecnología dentro de nuestra programación. Partir de lo que hacemos y analizar las perspectivas de cómo integrar la tecnología y en qué momento, así como para qué y considerar la validez de la innovación tecnológica como una aportación a la mejora de nuestra práctica para conseguir nuestros objetivos de aprendizaje. Este enfoque considera la necesidad de aunar el conocimiento tecnológico con el didáctico.